El Rey Sombrerero


Algo más de dos semanas después de la boda del príncipe Willy de Inglaterra con Lady K y a pocos días de la celebración de las carreras de Ascot, Philip Treacy vuelve a estar en boca de muchos. En primer lugar, por uno de sus diseños más polémicos (evitando decir la palabra feo), de la afanada boda real inglesa (ya que aproximadamente la mitad de las invitadas lucieron diseños suyos), si si, me refiero al diseño aldaba, ese que lució la hija del duque del York, Beatriz. 


Beatriz y la aldaba




La chica lejos de indignarse por la críticas recibidas y abandonar el “pimpollo” en un rincón por los daños causados, ha cedido dicho complemento para subastarlo a través de eBay y con ello, obtener fondos para Unicef y la asociación Children in Crisis –manera impecable de deshacerse del objeto-. El precio de salida fué de 17.900 dólares y el alcance  de 81,000 libras, o sea, ¡93.000 euros!  
¿Cómo te quedas? Muerta… Si ya lo decía mi abuela: "hay gente para todo".



Pues bien, Treacy, caballero de la Orden del Imperio Británico y considerado el mejor sombrerero del mundo, visitó Sevilla la pasada semana para asistir al décimo aniversario de HeRe, (sombrerería que comercializa sus diseños bajo la mano de Reyes Hellín) acompañado por el director general de su firma, Stefan Burlet.

Reyes Hellín y Treacy

El Rey Sombrerero,  se mostró agradable y accesible, se dejó fotografiar con todo aquel que se lo pidió, tomó salmorejo,  jamón serrano y le encantó (como tonto); se quedó prendado con los abanicos, a los que denominó “el sombrero de las manos”, y dijo que la mantilla española “es como una corona para la mujer”. ¡Este tío debería haber sido poeta, en lugar de sombrerero!

Este irlandés, que a temprana edad comenzó a coser  para las muñecas de su hermana, terminó estudiando en la Escuela Nacional de Arte y Diseño de Dublín, donde ganó una beca para el Royal College of Art. Su trabajo sombrerero nació como un hobby para aderezar sus diseños de ropa.  


Hizo prácticas con Stephen Jones y el salto a la popularidad le vino de la mano de la controvertida Isabella Blow, editora de la revista Tatler quien le encargó uno de sus sombreros. Y gracias a este empujón, comenzó a diseñar sombreros para Alexander McQueen's, Givenchy, Chanel, Valentino o Ralph Lauren,  consiguiendo ser galardonado hasta en cinco ocasiones con el título de mejor diseñador en los British Fashion Awards.



P.Treacy Colección  Primavera-Verano 2011

La creadora de un clásico de novias



Tras la boda del príncipe Williams y Lady K, el traje de novia ha sido una de las cosas que más han dado que hablar; las copias del traje en Asia a las 20 horas de la primera imagen de la novia, su diseñadora, que a estas alturas todo el mundo sabe que fue Sarah Burton y por supuesto, las múltiples comparaciones del diseño del vestido (las más fuertes con Grace Kelly, aunque princesa solo hay una). Es muy curioso que todos hemos aprendido de quién es el diseño de Lady K, pero… ¿Quién sabría decir que nombre está detrás del tan reproducido vestido de Grace? ¿Quién creó este género de vestido de novia? La respuesta es Helen Rose.



Helen Rose



Helen Rose, fue diseñadora jefe de vestuario de uno de los estudios de cine más importantes del momento. Tuvo un estilo sobrio y elegante, a la vez que innovador y natural. Una auténtica experta en trabajar tejidos complicados como la gasa.





Estudió en la Academia de Bellas Artes de Chicago y de allí fue directa a la Compañía Lester para crear el vestuario de comedias. Con el tiempo se mudó con su familia a California, consiguiendo un empleo en los Estudios Fox.


Sin embargo, el trabajo sólo le duró unos meses y regresó al diseño teatral, creando vestuario para espectáculos musicales en Twentieth Century Fox sobre 1942.



Helen sostiene su Oscar

Cuatro años más tarde, cuando la diseñadora jefe (Irene) renunció en los estudios cinematográficos, el puesto se le dió a Rose. Durante su tiempo allí vistió a actrices como Grace Kelly, Deborah Kerr, Esther Williams, Elizabeth Taylor y Lana Turner, creó el vestuario de más de 200 películas desde 1947 hasta 1966: Padre de la Novia (1950), La gata sobre el tejado de zinc caliente (1958), Alta sociedad (1956), El cisne (1956), La viuda alegre (1952), The Harvey Girls (1946), El diseño de la Mujer ( 1957). 

Y por ello, ganó el Oscar por The Bad and the Beautiful  (1952) y I'll Cry Tomorrow (1955) junto con ocho nominaciones más.

  
Rose, no sólo diseñó el vestuario de grandes artistas para la gran pantalla, tanto Elizabeth Taylor como Grace Kelly, se casaron con sus diseños, (Elizabeth con una adaptación del que ella misma llevaba en El padre de la novia, 1950). De modo que en 1958, abrió su propia marca que comercializó en exclusivas tiendas como Bonwit Teller, Marshall Fields o Magnin.

Taylor con vestido de gasa en La gata sobre el tejado de zinc y de novia
















 
Grace Kelly en su ceremonia civil


Eso sí, entre puntada y puntada, Rose también tenía vida…Y le gustaban los malotes, se hecho un noviete al que llamaba cariñosamente "Babe" que resultó ser Nathan Leopold Jr. (del dúo de asesinos Leopold y Loeb), quien motivado por la idea de cometer el crimen perfecto acabo entre rejas de por vida. Alfred Hitchcock se basó en esta historia para realizar la película "Cuerda" en 1948.




 Una vida entre películas, que acabó siendo un film más.

 

Un festival de palmas


Tras un fin de semana de cine y glamour en Cannes, hacemos repaso de los estilismos que han desfilado por la alfombra roja, especialmente de nuestras representaciones españolas, que han sido escasas y malas.

La primera en acaparar todos los flashes, fue Penélope Cruz, que aterrizó primero con un vestido de líneas rectas en azul tinta, de Stella McCartney, y más tarde con un diseño de Marchesa, corte sirena formado por tul lavanda, antiestético, matador… Revisando las fotos de Pe, me doy cuenta de cómo ha caído la actriz tanto en presencia, como en estilo de forma progresiva. Que si, que todos sabemos que hace poco que dió a luz y no todo mundo se somete a la “recuperaciones” milagrostéticas postparto. Personalmente creo que no está reñido no estar recuperada con ir estilosa, frecuentemente vemos a multitud de celebrities embarazadísimas y espectaculares en sus apariciones públicas.

Desde su reaparición en la gala de los Oscar, con ese desfavorecedor vestido made in Las Vegas, la muchacha no levanta cabeza con esos estilismos imposibles, el flequillo de quita y pon y sus apretadas nuevas curvas. Estoy más segura que aconsejada por un@ buen estilista y teniendo materia prima como tiene, las aguas podrían volver a su cauce. Lo cierto es que desde que esta con Bardem, va cayendo empicada. 


La otra gran presencia mediática española, fue la de nuestra modelactriz Paz Vega, que lo mismo se paseó con un bañador de estilo retro acompañado por collar de perlas (un conjunto muy práctico para la piscina), con un Gaultier negro de vertiginoso escote y mangas transparentes (digno de la familia Adams) o un mono rosa palo con lazo a la cintura y cuello con detalles de pedrería, de Azzaro, este último el mejor de su repertorio.


Entre las internacionales  mejor ataviadas, un impresionante Jane Fonda, con 74 años (así quiero llegar yo a la setentena, no me extraña que fuera la reina de los fusores), de Emilio Pucci. Diane Kruger, de las más elegantes, con un vestido color champagne de Calvin Klein o la actriz israelita Yuval Scharf  con un  precioso diseño negro con guipur en el escote.

Jane Fonda, Yuval Scharf y Diane Kruger
 Sin duda alguna, la mejor de las mejores, Sarah Jessica Parker, que aunque como muchos dicen que su estilo se debe al trabajo de grandes estilistas, aquí han dado en el clavo de lleno. Optó por un fabuloso diseño de estampado, con encaje de malla en la cintura y escote que baja  por los brazos hasta los puños, minuciosa obra de Elie Saab. A la fiesta The Weinstein Company VIP Press Event  asistió, con un vestido blanco, que hemos visto estos meses de primavera hasta la saciedad en todas las editoriales, algodón con aplicaciones de guipur de Dolce & Gabbana. ¡Well done!


De las extranjeras peor vestidas: La actriz, cantante y humorista Axelle Laffont, con un mono escotadísimo que le quedaba horrible. Una atrevida Cheryl Cole de Stéphane Rolland, el vestido en sí no estaba mal… pero el adorno del cinturón parecía un secador de viaje y ese escote hay que poder llevarlo, querer no es poder. Y poniendo el colofón, Rachel McAdmas, que acudió a la cita con pantalón de hilo y corpiño de lentejuelas, ambos de Monique Lhuillier, ¡¿Dónde pensaba que iba?! La mezcla de tejidos demasiado estrambótica y el resultado perjudicial para su figura.

Axelle Laffont, Cheryl Cole y Rachel McAdmas




Para terminar solo comentar que hubo dos novias a la fuga; Fan Bing Bing  y Anna dello Russo de La Croisette. 
Que descontrol…